Trallazos de amargura
Iván Thays presenta esta novela con una intensidad considerable, y sin rehuir el combate con la historia reciente de su país. Oreja de Perro es un lugar desolado, cuya altura saca lo peor de cada ser humano, y en el que se han congregado un buen número de periodistas y militares. Precisamente por eso el protagonista encuentra una serie de personajes caóticos: Jazmín, una mujer que arrastra un secreto en su vientre, Scamarone, un fotógrafo viejo y resabiado, una limeña que sueña con amar a un corresponsal de guerra, o un hombre amnésico que estudia chino.
El ambiente que Thays recrea es opresivo y descreído, las huellas de los desmanes están aún demasiado frescas, y no van a cerrarse con un programa de beneficios sociales. Pero la espera ayuda también al protagonista a bucear en sus recuerdos, para saber si aún puede reencontrarse con una existencia que merezca la pena vivir, de ahí el fraseo corto, como trallazos de amargura, y la intermitencia calculada con la que se entremezclan el presente y su demoledor pasado.
Una mezcla que se presenta con una acertada primera persona narrativa, y unos ojos que no sólo contemplan a las criaturas que pasan por su vida en esos días de espera, sino que escrutan la política, la inconsistencia humana y hasta la venganza, aunque muchos la disfracen de nuevos rebrotes terroristas. Thays es un autor que no sólo no le da la espalda a su realidad, sino que busca la mejor manera de reflejara en sus obras, analizándola pero también enfrentándose a ella.
‘Un lugar llamado Oreja de Perro’.
Iván Thays.
Anagrama. 212 páginas.
(LA VERDAD, ABABOL, 10/1/09)
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarTiene buena pinta.
ResponderEliminarBuen motivo para retomar los hispanoamericanos.
Un abrazo
Oquendo de Amat vuelve de la tumba en Historias asombrosas, y pone en su lista negra a Ivan Thays.
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