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viernes, 3 de diciembre de 2021

LA BESTIA - CARMEN MOLA

 

Reseña de la novela La bestia, de Carmen Mola, por Antonio Parra

Título: La bestia. Autora: Carmen Mola

Editorial: Planeta. Año: 2021. Páginas: 544

Sobre la autoría

    Carmen Mola nació en la primavera de 2017, en Madrid, cuando los autores Jorge Díaz, Agustín Martínez y Antonio Mercero decidieron lanzarse a una aventura de creación colectiva que cristalizó en una primera novela, La novia gitana, a la que seguirían La red púrpura y La nena. A lo largo de estos años, los tres autores han continuado con sus proyectos personales, tanto no-velas como guiones.

    Jorge Díaz (Alicante, 1962) es autor de las novelas Cartas a Palacio y La justicia de los errantes, entre otras, así como de series de televisión como Hospital Central.

    Agustín Martínez (Lorca, 1975) es creador de series como Feria, la luz más oscura o La Caza (Monteperdido y Tramuntana), y autor de las novelas Monteperdido y La mala hierba.

    Antonio Mercero (Madrid, 1969) ha llevado en paralelo la escritura de guiones de cine y televisión (Felices 140, Hospital Central, Hache) con la publicación de novelas, entre cuyos títulos se encuentran Pleamar o El final del hombre.

Sinopsis de la obra

    Corre el año 1834 y Madrid, una pequeña ciudad que trata de abrirse paso más allá de las murallas que la rodean, sufre una terrible epidemia de cólera. Pero la peste no es lo único que aterroriza a sus habitantes: en los arrabales aparecen cadáveres desmembrados de niñas que nadie reclama. Todos los rumores apuntan a la Bestia, un ser a quien nadie ha visto pero al que todos temen.

    Cuando la pequeña Clara desaparece, su hermana Lucía, junto con Donoso, un policía tuerto, y Diego, un periodista buscavidas, inician una frenética cuenta atrás para encontrar a la niña con vida. En su camino tropiezan con fray Braulio, un monje guerrillero, y con un misterioso anillo de oro con dos mazas cruzadas que todo el mundo codicia y por el que algunos están dispuestos a matar.

Reseña de La bestia

PARA EL LECTOR CAUTIVO

    Cada año, una de las obras más difíciles de reseñar, al menos para un servidor, es la ganadora del Premio Planeta, por todo lo que conlleva el galardón, por todo lo que se conoce del mismo (incluso antes del mismo) y también, por qué no decirlo, porque durante muchas ediciones la calidad huía aterrada de la novela ganadora.

    Si a eso le sumamos este año lo ocurrido con el fenómeno Carmen Mola, entenderá el lector que la complicación se puede multiplicar… hasta por tres, y no porque el secreto desvelado me haya sorprendido, puesto que algunos intuíamos que tras ese fantástico seudónimo se ocultaba más de un hombre, aunque tampoco nos rasgábamos las vestiduras, yo al menos no lo hice, como ahora ha hecho gran parte de nuestra sociedad, sino por todo lo que dicho secreto ha acarreado en las últimas semanas.

    En cualquier caso, aquí se trata de valorar obras, y no tanto los fenómenos editoriales, sociológicos o de moda, que se escondan tras ellas. Y lo primero que he de decir sobre el texto es que es tremendamente adictivo, y de verdad lo digo intentando sustraerme a todo lo externo. Como lector, y como lector de novela negra y de misterio, encontrarme en las primeras páginas a un perro suburbial mordisqueando el cráneo decapitado de una niña me parece algo brutal y capaz de engancharme ya para el resto de la novela.

    No me corresponde a mí, no quiero asumir ese papel, ser la mosca recalcitrante que se pose en anacronismos, si los hubiera, o en fallos de trama, si los hubiera, o en incoherencias lingüísticas de algún personaje. De verdad que no, porque lo que el lector que llevo dentro sentía era la atracción, el interés por seguir leyendo, y la velocidad a la que se iban sucediendo los hechos.

    A veces hay quien olvida cuál es la esencia de una novela de este tipo: misterio, crimen, investigación, y no es otra que mantener en vilo al lector tanto como se pueda. La Bestia lo consigue sobradamente. Y en cuanto a su estilo, no creo que pesen tanto algunas taras que otros han señalado, tales como “un lenguaje algo plano, el uso monótono del presente, la adecuación lingüística de algún personaje…”, de verdad me cuesta recordar otros premios Planeta, con una calidad literaria bajísima, a los que se les haya disparado tanto y tan rápido como muchos francotiradores han hecho con esta novela.

    Sé que ahora me voy a contradecir y que había anunciado que no lo haría, pero no puedo evitar hacerme algunas preguntas: ¿se habría afinado tanto la crítica de ser otro el autor, de haber sido una mujer (o tres), por ejemplo?, ¿se habrían afilado tanto algunos colmillos de no haber precedido a este premio el éxito de una trilogía negra?, ¿qué duelen más, las inexactitudes narrativas (si las hubiera) o el fenómeno de los tres autores ocultos?, ¿es la envidia el combustible de algunas reseñas? Tengo mis propias respuestas, pero deberá el curioso lector alcanzar las suyas.

    Regreso ahora a mi personalidad lectora, para decir que el ritmo es brutal, la ambientación precisa, los perfiles psicológicos atinados, la miseria perfectamente reflejada, y hasta la trama medida, porque hay una muerte, algo prematura en mi opinión, que podría haber amenazado a la novela con el naufragio, y en cambio el obstáculo se resuelve con mucho oficio. Eso sí, también he creído ver las costuras guionistas de los tres autores, no en vano son especialistas del medio, detalles que me hacen pensar en una posible serie: personajes que agotan su participación de forma fulgurante para dar paso a otro, escenas impactantes, intensidad criminal, cierta velocidad investigadora, etc. Detalles que estamos más que acostumbrados a ver en la pantalla.

    ¿Y si así fuera, habría algo de malo? Ni sería la primera novela que lo hace ni será la última. Pero volviendo a lo literario, me quedo con las sensaciones provocadas por la trama, por Lucía, la joven protagonista superviviente y dura como ella sola, por esa ambientación antes mencionada, por la manera de matar, incluso por el Madrid de 1834. Y esas sensaciones me tuvieron anclado al sillón, que es mucho más de lo que algunas otras me han provocado.

    Que alguien ahora piense que es una novela aceptable, o incluso del montón, pero un guion magnífico, pues es posible, pero repito, cumple con creces esa función tan apreciada de una buena novela: cautivar al lector de principio a fin. Y lo demás, quizá sean cuentos o rabietas de doloridas envidias.

https://www.elquintolibro.es/2021/11/resena-de-la-bestia-de-carmen-mola/?fbclid=IwAR0XTfR_Qg3VLLs3yZkE3YJWnIbp7NQGdOIEYYAciDbMW8jfdIz-gkhIGvw

3 comentarios:

Marian dijo...

¡Hola!
te leo desde hace tiempo y me he animado a dejarte un comentario. Yo leí la Bestia hace poco y te cuento que, independientemente de que el Premio Planeta nunca me haya gustado, y que opine que detrás de lo del seudónimo de Carmen Mola ha habido fraude (yo siempre juzgo la obra literaria e intento dejar a un lado lo demás), esta obra me ha parecido que no está mal, aunque no me ha convencido cien por cien como sí lo hizo la trilogía de La novia gitana (siempre pensé también que había un hombre tas la pluma). Han habido cosas que me han gustado y cosas que no, de hecho, en algunos tramos he estado bastante enganchada a la lectura, pero otras veces me ha aburrido lo que me contaba. Por cierto, no entiendo bien a que te refieres cuando te preguntas "¿es la envidia el combustible de algunas reseñas?" "¿envidia a que?"
En mi caso, siempre soy muy sincera con todas mis opiniones, si algo me gusta, pues me gusta y si no me gusta pues no me gusta. Y no me caso con nadie, ni con autores, ni con editoriales.
En fin, que los lectores somos un mundo y para gustos...
Saludos

Gomes y Cia dijo...

Hola Marian, gracias por tu comentario. Coincido mucho contigo en lo que dices de la intermitencia, a veces no podía parar de leer y otras en cambio seguía por la inercia del saber. Lo de la envidia lo dije porque en algunas reseñas que he leído por ahí de esta obra le atizaban sin cuartel y de forma exagerada, como si hubietan visto la ocasión de ajustar cuentas con quien vendió miles de ejemplares con la trilogía negra. Un saludo.

Marian dijo...

Ahhh ok, entiendo... te referías a envidia de otros escritores o autores hacia ellos por haber tenido tanto éxito con la trilogía. Pues me alegra saber que a ti también te aburrió en algunos tramos, coincidimos.
Supongo que habrá de todo, gente que la alabe exageradamente y gente que le atice sin cuartel, jeje. Yo me quedo en un término medio. En un "me ha gustado" pero "no me ha gustado"
¡Gracias por tu contestación!