DOCE LUNAS
MANUEL E. MIRA
EL
MURMULLO DEL TIEMPO
1) ¿Qué
motivaciones le llevaron a escribir esta novela?
Cuando vi el desconocimiento que sobre
su propia historia tenían mis amigos y mis hijos, me entristecí. Tenía que
hacer algo para que no quedara todo en el olvido. No se merecen nuestros
antepasados que les ignoremos tan cruelmente; ellos son nuestra razón y nuestra
forma de ser. Debemos ser agradecidos a esas personas que amaron, sufrieron,
lucharon, nos legaron la vida y nos dejaron tanto bien. Desde la persona más
insigne y aparente hasta el más humilde y anónimo de los canteros que talló la
piedra que hay bajo los cimientos de la catedral. Todos han pasado por nuestra
vida y tienen que ver con ella. A todos les debemos respeto.
2) ¿Desde
cuándo le viene ese gusto por la Historia a un ingeniero como usted?
La Historia me ha gustado desde muy
niño. Admiraba a quienes la conocían y la sabían contar. Recuerdo que me
emocionaba con las historias de ciego que escuché en los mercados cuando era
muy pequeño. Conocer y amar la Historia es como vivir dos veces; es amar la propia
Vida. Para mí la ingeniería es la forma elegida para actuar en la vida laboral.
La Historia no se elige, te elige ella a ti. La llevas siempre en tu mochila.
3) ¿Cómo
valoraría la importancia de la familia en esta novela?
Nadie nace por sí mismo ni muere para
sí mismo. La familia es nuestro "Yo continuado" Todo nuestro pasado y
nuestro futuro está depositado en ella. Es la que nos da el Nombre y el Ser.
4) ¿Con
qué personajes de la novela ha disfrutado más, hay alguno que se le haya
“rebelado” pidiéndole más protagonismo?
Disfruté muchísimo creando a los
personajes. Casi todos ellos tienen sus semblantes tomados de la realidad;
quizá por eso son tan creíbles y carentes de tópicos. Hay uno en particular que
nació de la inventiva, con carácter de ser un "figurante", pero que
comenzó a crecer, pidió paso, y le dejé que creciera. Fue Gabriel: un personaje
fabuloso. Hay otro que tuve que "inventar" y que porta una carga
emotiva impresionante: "Mimanuel". Le creé la historia para que él me
ayudase a contar la mía ¡y vaya si me la contó! Es fundamental en la historia.
5) ¿Cree
que los episodios de Cuba y Filipinas han sido tratados ya suficientemente en
nuestra literatura, que lo españoles saben realmente lo que pasó allí?
En absoluto. Ahí se echó mucha tierra,
y luego le pusieron mármoles encima, para tapar la más sangrante e ignominiosa parte
de nuestra historia. Desde reyes felones a políticos de visión obtusa. Duele;
de verdad que duele, y mucho, cuando se investiga y se estudia cómo fueron las
cosas; y no estoy pensando sólo en las derrotas y en los muertos, pienso en la
necedad y la ceguera de los que dirigían a España en aquella época. De lo que
pudo ser y no fue. Comprendo que surgiera la generación del 98 como un punto de
ruptura ante el espanto.
6) Cartagena
tiene un monumento a los héroes de Cavite, y sin embargo se habla poco de ello,
¿a qué se debe eso?
Sí, se le resume como "Héroes de
Cavite", aunque su leyenda es: Héroes de Cavite y Santiago de Cuba. Es muy
bonito y alegórico, pero si conoces un poco la historia… se desmitifica mucho, se
desinfla, sin querer en absoluto ignorar a los auténticos héroes, como Fernando
Villamil y los anónimos marinos que allí dieron su vida. Pero, realmente, es un
monumento al desastre. Quizá por eso no se habla mucho de ello.
En mi novela, hablo de Cuba y muy
especialmente de "Los héroes de Baler" ―los auténticos últimos de
Filipinas― que escribieron una de las páginas de heroísmo más serias de España.
Un hecho reconocido en todas partes y que nosotros no conocemos. Ignoramos que
entre ellos, hubo dos paisanos de nuestra región; uno de Mula y otro de Cieza.
Ellos, en cambio, no tienen monumento que los recuerde. La historia es justa y
veraz; los hombres…no tanto.
7) La
narración de la inundación de Murcia en 1879 es impresionante, ¿cómo logró
calar tan hondo en el lector?
Siendo totalmente fidedigno.
Sinceramente creo que no queda nada de aquella desgracia que no esté reflejado
en la novela y que exprese el dramatismo y la solidaridad que suscitó en todo
el mundo. He tenido la suerte de haber sabido integrar en la novela un capítulo
muy importante y documentado.
8) La
historia de esta familia parece quedar algo truncada, ¿significa eso que habrá
continuación?
La novela queda cerrada con la vida de
Andrés y de Antonia durante el periodo de 1855 a 1901. Pero Candela quiere
conocer toda la VIDA de sus antepasados y eso ha hecho que nazca de ella una
auténtica escritora de éxito y Candela continúa escribiendo. Al principio de
novela Candela se define así:
"Mi
nombre es Candelaria Marín, pero todos me llaman Candela. Esta historia comenzó
en Murcia, durante el mes de agosto del año 1995. Tenía yo entonces diecisiete
años y mil dudas por resolver sobre mi futuro."
Ojalá esta novela la lean muchos
jóvenes, con mil dudas sobre su futuro, y se suscite en ellos el deseo de escribir
y surjan muchas Candela Marín o Antonia Parra. Ellas y ellos serían los auténticos
continuadores.
9) En
esta novela hay amor, Historia, aventuras, costumbrismo, ¿cómo se define
entonces Manuel Mira, novelista romántico, histórico, de aventuras?
¿Cómo definirías tú a una persona que
escribe desde y para la VIDA? La vida lo tiene todo: amor, emoción, historia,
aventura, romanticismo… Sólo me interesa hablar y contar lo que es la VIDA (con
mayúsculas) Eso es para mí una novela.
10) ¿Cuáles
son sus principales influencias literarias? ¿A quién le debe el haberse
convertido en escritor?
Yo no sé si soy escritor o escribidor,
eso el tiempo y los lectores lo dirán, y tampoco me preocupa. Yo escribo desde
la observación y la ternura. Rescato y pongo acentos en los valores como la
bonhomía, el buen hacer, el respeto a la verdad, la capacidad de sacrificio, el
hacer ver que todo es posible, que se puede conseguir un sueño. Siembro la
inquietud de que podemos aspirar a ser mejores personas para escribir las páginas
de nuestra propia historia.
En cuanto a mi formación, aprendí a
leer en el Quijote y en mi casa había libros de historia que leí con avidez. La
literatura rusa me ha influido mucho y también la sudamericana. Comencé
escribiendo relatos y cuentos hasta que desde uno de ellos salté a la novela.
11) Esta
novela fue Premio Libro Murciano 2104, ¿cree en los premios, qué supuso este
galardón para usted y para la novela?
No tengo experiencia para poder dar
una opinión cualificada. Yo, hasta ahora, no me puedo quejar pues me han
premiado el primer relato que escribí y la primera novela que he escrito. Puedo
asegurar que no había ninguna mediación en ellos. Luego tengo que creer. Ha
sido un buen apoyo para que el lector y los medios se fijen en ella. Luego es
el boca a boca lo que funciona.
12) ¿Cómo
convencería a un lector desconocido para
que se acerque a su obra?
No puedo prometerle que su lectura le
vaya a entusiasmar ―eso depende de sus preferencias y de lo que espere de ella―,
pero si lo que desea encontrar es el amor y el conocimiento de nuestra bella
historia ―tan cercana y tan olvidada― contada con fidelidad y con ternura…
entonces sí le puedo prometer que le enriquecerá y le emocionará tanto como a
mí me enriqueció y me emocionó escribirla.