DOCE LUNAS
ROSA HUERTAS
LOS HÉROES SON MENTIRA
ROSA HUERTAS
LOS HÉROES SON MENTIRA
1)
¿Qué atrajo más la curiosidad de Rosa
Huertas, esta guerra casi olvidada de Ifni, o la historia que adivinaba en las
palabras de su padre?
Ambas
situaciones. Todas las novelas nacen de un pequeño embrión y al principio nunca sabes si aquello que
tienes necesidad de contar llegará a convertirse en un relato, o dará para
poco. Esta novela empezó en un hospital
de Cartagena una tarde de julio en la que mi padre padecía un estado
febril. Empezó a hablar y yo pensaba que eran delirios provocados por la
fiebre. Se puso a contarme una historia de unos paracaidistas que murieron en una
emboscada en Ifni. Yo sabía que mi padre había estado en la guerra de Ifni,
pero no sabía mucho más. Casi nadie sabe qué guerra es ésa. A los mayores de
50, con suerte, les suena. A la gente más joven no le suena de nada. Necesitaba
saber por qué le obsesionaba ese suceso a mi padre y también qué ocurrió en
aquella guerra olvidada.
2)
¿Cómo se transforma la memoria privada y familiar en argumento público y
novelado? ¿Es fácil exponer así al mundo un suceso tan íntimo?
Nunca pensé
que sería capaz de escribir unos hechos tan personales, el pudor se trasforma y
desaparece cuando la escritura se convierte en una forma de salvación. Fue mi
manera de sobrellevar el dolor y a mi padre también le sirvió, en parte, para
mantener la mente ocupada.
3)
Los héroes son mentira aparece como
novela juvenil, aunque su fuerza trascienda las clasificaciones genéricas, ¿se
han reunido en ella tres generaciones?, ¿hasta qué punto ha contribuido su hijo
en la génesis de esta novela?
Él ha
colaborado algo menos de lo que se cuenta en la novela, pero me arropó en unos
momentos difíciles, se portó como una persona muy madura a pesar de que tenía 16 años escasos. También
me ayudó con las tecnologías y las redes sociales, algo en lo que está más
preparado que yo.
4)
De la lectura de la novela se desprende que hubo una especie de hermandad entre
quienes estuvieron en Ifni, ¿es eso cierto?, ¿ha conocido Rosa Huertas más historias
derivadas de aquella guerra?
Así parecía
por los recuerdos de mi padre. Hay varias asociaciones de veteranos de Ifni con
las que he contactado que mantienen viva la memoria de los que sufrieron
aquella guerra absurda.
5)
¿Cómo asimiló su padre el desconocimiento de la guerra de Ifni en la península?
¿Cómo juzgaría ahora ese hecho Rosa Huertas, dejando a un lado lo personal?
Creo que para
él fue traumático el hecho de que nadie hablase sobre ello, aseguraba que en toda
su carrera militar jamás había vuelto a oír hablar de aquella guerra. Y él la
sufrió con toda su crudeza.
6)
¿Qué significaron para usted los jilgueros que menciona en la novela?
Me pareció una
imagen hermosísima: los pájaros saliendo sus jaulas cuando los soldados
regresaron a casa después de la guerra. Simbolizan la libertad, después de los
meses de angustia en la trinchera.
7)
Hay un cariño especial hacia el personaje de Pelargón pero, ¿hay algún otro
personaje que haya fascinado a Rosa Huertas, de entre todos los que
compartieron las vivencias de Ifni con su padre?
He llegado a
encariñarme de verdad con todos ellos, con los reales y con los de ficción. El
asistente de mi padre, Pelargón, me parece entrañable. Pero también el Vendas (estudiante
de medicina que reniega de la guerra), el impulsivo Pichabrava o el enamorado
Billy el Niño. Sobre todos, el personaje del teniente que encarna mi padre.
8)
En esta novela hay dos versiones de la valentía, la oficial y la real, ¿qué es
para Rosa Huertas el heroísmo?
Es enfrenarse
a la realidad con lo que se tiene sin desfallecer, es pensar también en el compañero
y en los que están alrededor. Es plantarle cara a la adversidad, ya sea una
guerra o una enfermedad.
9)
Tengo entendido que lanzó más de un “mensaje en una botella” para cerrar esta
novela, buscando nombres y personas del pasado, ¿ha querido el destino que
alguno de esos mensajes recibiera alguna respuesta?
Casi todas las
semanas me llegan mensajes de personas relacionadas con Ifni, y es asombroso cómo
se ven identificadas con lo que se narra en el libro. Sigo buscando a los
protagonistas de aquella guerra y seguro que aparecerán más.
10) Volviendo a la relación
padre-hija, uno de los motores de la obra, ¿qué supuso esta novela en la
relación de Rosa Huertas con su padre?
11) En todas sus novelas hay una conexión entre un tiempo pasado y el presente, ¿facilitó eso las cosas a la hora de escribir una historia tan personal como ésta?
Supongo que
sí, es cierto que disfruto escribiendo historias que se mueven en dos planos
temporales. Me divierte mucho investigar hechos y personajes históricos para
las novelas y muchas veces descubro situaciones que me ofrecen vías nuevas en
el relato.
12)
¿Qué les diría Rosa Huertas a todos los lectores que aún no se han adentrado en
la memoria del teniente Huertas, cómo les animaría a leer esta novela?
Les diría que es una historia emotiva e intensa de
amistad, de compañerismo, de amor, de lucha contra los elementos, de lealtad,
de derrotas, de descubrimientos, de amor filial con la que lectores de tres
generaciones se pueden sentir identificados.